El bienestar humano consiste en tener satisfechas nuestras necesidades. Los niños a la edad de 3 a 4.5 años, comienzan a ganar autonomía y se sienten orgullosos de sus pequeños logros. Fomentar el autocuidado y fortalecer los acuerdos familiares permite apoyarles en sus conceptos de bienestar a largo plazo.

Bienestar entre los 3 a 4.5 años (Niños neurotípicos)

Las necesidades de los niños entre los 3 y 4.5 años aún dependen de sus cuidadores. Sin embargo, el niño va ganando autonomía y puede procurarse por sí solo varios elementos de bienestar.  El lenguaje verbal ya es fluido y el niño puede pedir y satisfacer sus necesidades a través su uso.

En esta edad las necesidades sociales comienzan a ampliarse y los pequeños suelen crear sus primeras amistades. Sentirse orgulloso de sus logros, cuidado, respetado y aceptado es importante para crecer en bienestar.

Bienestar en el autismo (edad 3 a 4.5 años)

En esta fase donde muchos niños neurotípicos comienzan a tener amigos, nuestros pequeños autistas pueden tener muchas dificultades para establecer relaciones sociales.  Es muy común que si el niño es verbal prefiera establecer amistades con adultos que con otros niños de su edad. Si ese es el caso, celebra que tu hijo o hija tiene amigos con los que se siente bien.

Yo en lo personal creo que como sociedad deberíamos hacer un esfuerzo en mejorar la educación emocional. Pero si se trata de la condición de autismo, es casi una obligación hacerlo de manera consiente. La educación emocional es el pilar para poder construir bienestar en el futuro.

El autismo en niñas difiere del autismo en niños. Las niñas autistas suelen usar de manera inconsciente una técnica llamada camuflaje social. Esto hace que ellas comiencen a copiar los comportamientos de las niñas que ven mejor adaptadas socialmente. Esto permite que pasen desapercibidas casi siempre, pero genera una desconexión con quienes son realmente. Lamentablemente este camuflaje social, lleva a que muchas de ellas no sean diagnosticadas a tiempo y como adultas viven depresión, ansiedad y baja autoestima.

¿Cómo trabajamos el bienestar con Cecilia en esta etapa?

En general Ceci siempre buscó conectar con otros niños. Su falta de desarrollo verbal le dificultaba generar relaciones de amistad, pero compensaba con su hermosa sonrisa y mucho movimiento.  Los niños pueden comunicarse y aprender a jugar a través del movimiento. Por ello buscaba llevarla mucho al parque donde pudiera encontrarse con otros niños.

Yo observaba como se relacionaba y de allí identifique que guiones sociales podían servirle mejor para iniciar la interacción. En especial le enseñe a decir hola, me llamo Cecilia y tengo 3 años. También le enseñé a decir “¿puedo?” para referirse si podía tomar un juguete en el parque.

Debo reconocer que me convertí en una mama helicóptero. Esas madres que están constantemente pendientes y cerca de los hijos y entran en acción muy rápidamente. Pero hay que tener en cuenta que Ceci pasaba 6 horas diarias en el Kindergarten, por lo que el momento del parque era el momento de escuela social y donde podía realmente apoyarla. Si nuestros hijos tienen retos que otros niños no tienen, está bien y es necesario acompañarlos de manera más intensa. Poco a poco uno nota como ya se manejan más fácilmente en situaciones sociales y se les puede dar más espacio para que se manejen solos.

En nuestras rutinas diarias siempre trataba de incluir espacios donde al llegar a la casa pudiera tener descanso de la interacción social. En especial si incluíamos conscientemente tiempo de televisión para que pudiera desconectar un rato.

Necesidad de movimiento en el autismo.

Es curioso que el estereotipo que se tiene de los niños autistas es un pequeño tranquilo en una esquina evitando cualquier interacción social. Sin embargo, nuestra realidad y la de muchos, es que tienes un niño lleno de energía que necesita mucho movimiento. Suelen ser niños hiperactivos, que saltan y corren por todos lados.  Yo suelo bromear que el día que descubra de donde viene la energía de Cecilia, voy a patentarla como fuente de energía limpia y renovable y nos haremos millonarios.

Es curioso que muchos de los niños en el autismo necesiten tanto movimiento, pero también presenten cierto nivel de torpeza e imprudencia. Por ello, es necesario acompañarlos y cuidarlos para que no se lastimen. En la condición de autismo el cerebro está conectado de manera diferente que el cerebro neurotípico. Esto hace que la relación del cuerpo con su entorno sea diferente y eso incluye por supuesto el movimiento.

Cuando detectamos la condición de autismo de manera temprana tenemos a nuestro favor la neuroplasticidad y podemos lograr conexiones en el cerebro que más tarde son más difíciles de establecer. El libro de un niño que se mueve es un niño que aprende ofrecer ideas geniales para apoyar a nuestros pequeños a ganar agilidad y moverse mejor.

Es conveniente tener en casa un trampolín y un columpio para que nuestros pequeños drenen la energía que tienen en sus cuerpos y puedan relajarse mejor.

Mindfulness en familia

En nuestros espacios de esparcimiento en casa, aprovechamos para hacer manualidades juntas. Muchas de estas manualidades se relacionaban con elementos sencillos de mindfulness que nos permitían relajarnos y ganar balance en familia.

En otro artículo te compartiré material muy concreto al respecto para que también puedan disfrutarlo en casa.

Pictogramas que apoyan en el autismo

En esta etapa es probable que los niños hayan ganado más lenguaje verbal. A pesar de ello, sigue siendo conveniente reforzar la comunicación a través de pictogramas. Estas imágenes ayudan a reforzar el mensaje de bienestar y les dan estructura a nuestros aprendices visuales:

Pictogramas para Rutinas

Ahora que el niño va creciendo, conviene involucrarlo en la decisión de su rutina. Quizás no quieras ni puedas negociar cada una de sus actividades, pero trata de incluir 2 o 3 actividades donde él o ella puedan escoger que quieren hacer. Todas estas actividades pueden incluirse en un calendario visual que permita la movilidad de los elementos.

Pictogramas para fomentar la autonomía.

Nuestros niños autistas tienen dificultades para manejarse en situaciones sociales. Hay ciertas expectativas de cómo comportarse en contexto sociales. Si bien no podemos cubrir todos los escenarios sociales que se puedan presentar, podemos usar guiones sociales simples para guiarlos.

A continuación, te comparto los pictogramas de situaciones sociales muy simples que puedes utilizar con tu hijo o hija autista:

  • Ir de compras
  • Presentarse a otro niño o niña
  • Pedir prestado un juguete.

Semáforo de los acuerdos familiares

Cuando íbamos caminando con Ceci en la calle, muchas veces ella se molestaba porque quería hacer sus planes e ideas. Recuerdo que yo le repetía una y otra vez mi mantra:

“Las relaciones humanas son de 2 y nos encontramos en el medio a través de las palabras.”

En nuestras relaciones humanas, todos estamos buscando satisfacer nuestras necesidades. Y eso está bien. Tener nuestras necesidades satisfechas nos lleva al bienestar. Es importante recordar que vivimos en sociedad por lo que el respeto a nuestras individualidades y los acuerdos son fundamentales para nuestro bienestar. Por ello, conviene comenzar a introducir el elemento del acuerdo dentro del semáforo familiar.

Acá ya el semáforo es un poco más amplio. Sigue existiendo el sí, dale sin problema. El no, porque yo como madre o padre lo digo, pero recuerda que es para cuidarte. Y ahora se introduce el color amarillo, el que equivale a hablemos y lleguemos a un acuerdo.

Cuando estamos enseñándoles límites a nuestros hijos pequeños, estamos construyendo las bases para que ellos sepan poner límites como adultos. A muchos adultos autistas les cuesta cuidarse y protegerse porque no aprendieron a poner esos límites sanos. Esta dinámica familiar los prepara para que puedan establecer los límites de manera natural.

Reflexiones de madre azul para otras madres y padres azules.

Para que nuestros niños puedan vivir en bienestar nosotros mismos debemos enseñarles con el ejemplo. Es común que con toda la energía y esfuerzo que requiere apoyarles en su desarrollo nosotras quedemos de últimas en la lista. Nos falta la energía en muchas ocasiones y nos desbordan los nuevos retos que se nos van presentando en el camino.

Para mi sin tener familia en el país donde vivimos ha sido un reto mayor y sin duda muy desgastante. En muchas ocasiones me he autodefinido como la constante Ave Fenix, renaciendo desde las cenizas, una y otra vez. 

Quiero compartirte 3 reflexiones de este camino:

1.- El camino se aligera si te rodeas de una red de apoyo para que puedas renovarte.

Estando en un país donde el idioma natal no es el mío y donde el temperamento es tan diferente a nuestra cultura ha sido un reto mayor conseguir esa red de apoyo. Sin embargo, la inversión de energía en ampliar esa red ha sido muy valioso y ha permitido vivir mejor este reto de vida. Le crea a Cecilia y a Samu una cosmovisión de comunidad y me permite tener a quien pedir ayuda si lo necesito.

2.- Se enseña mejor el bienestar que se practica en la vida diaria, que lo que se estudia con la teoría.

Hay muchos libros que tratan estos temas de bienestar. Existe mucho material sobre psicología positiva, sobre mindfulness, sobre bienestar, nutrición, etc. Libros y material para leer sobran. Lo importante es poder poner todo eso en práctica a nuestra manera. Poder incorporar ese conocimiento en nuestra rutina diaria. Se necesitan pocos minutos al día para hacerlo, pero se necesita ser consistente en el autocuidado para poder enseñarlo a nuestros hijos.

Como el tiempo falta cuando estamos apoyando al desarrollo de nuestros hijos en el autismo, conviene organizarse con tareas multipropósito. Estas actividades pueden incluir los hobbies de la familia y a la vez los elementos de autocuidado que queremos inculcar en los niños y debemos practicar con nosotros mismos.

3.- Cuidado con el porno inspiracional en el Autismo.

Hay otra madre azul que escribe en Instagram sobre el porno inspiracional en el autismo. Debo decir que me encanta el nombre que escogió. En efecto uno puede aprender mucho en este camino. No por eso debemos tomar a la ligera los retos que vienen con este reto. En la medida que entendemos y respetamos nuestros sentimientos de frustración, miedo y ansiedad podemos buscar vivir mejor en bienestar.

El bienestar no viene de vivir una piscología positiva falsa, donde todo es color de rosa. Más bien viene de una decisión diaria, consiente y disciplinada de cuidarnos incluso frente a los retos de la vida. Más de un día no tendremos las fuerzas y allí es donde nuestro aprendizaje teórico sobre bienestar tiene que venir a la practica en la vida real.

Te deseo mucha fortaleza en el camino que estás caminando con tu hijo o hija en el autismo y te recuerdo que lo estás haciendo muy bien. Estás trabajando desde el amor y la conciencia.  

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Te invitó a seguir leyendo el artículo relacionado al Bienestar entre la edad de 4 a 6 años. Y si te faltó algún elemento anterior, siempre puedes visitar el artículo de Bienestar entre los 1.5 a 3 años. Esperamos que nuestro material te esté ayudando en tu vida familiar y en tu crianza especializada.

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